Mi baúl de los recuerdos


RESEÑAS que vale la pena tener en cuenta


Del blog Toma mi mano de Miren E. Palacios

http://mirenepalacios.blogspot.com.es/2013/09/resena-mi-vida-si-ti-recuerdos-de-mila.html


Anónima llegada a mi correo privado


Resulta difícil contaros mis impresiones sobre esta novela sin hacer el más mínimo espóiler de la misma, y a la vez poderos presentar una buena reseña. Pero merece la pena y voy a intentarlo.
·      Sinopsis

Olivia, la protagonista, se encuentra, por casualidad, con su antiguo amor en un restaurante. Entonces, sin pretenderlo, ha de afrontar los recuerdos de su vida pasada, la vivida con él y la que transcurre después de la ruptura. Pero no son unos recuerdos cualquiera, sino unos retazos de vida especiales que, según cómo los maneje, serán la clave de su pasado, su presente y su futuro.

·      Personajes
Es una novela cuyos personajes están muy bien definidos en cuanto a características, rasgos personales y su papel dentro de la trama. La escritora nos transmite una serie de valores a lo largo de la novela y cada personaje podríamos decir que es representativo, de forma especial, de un valor concreto de forma acusada, aunque cada uno de ellos, por supuesto, reúne varios a la vez. No obstante, la protagonista, Olivia, que es la que lleva el hilo conductor de la historia, es quien encarna un cúmulo mayor de peculiaridades, pues no olvidemos que refleja varias etapas por las que puede pasar el ser humano.

·      Estructura
La estructura es una apuesta un tanto arriesgada de la escritora, por cuanto que es una escritora novel, pero es cierto que la ha manejado con cierta soltura. Es más, he de reconocer que es de las que a mí me gustan. No es la típica historia lineal. Los hechos no se suceden de forma estrictamente cronológica, sino que hay continuos flash-back, y eso le confiere un cierto aire de originalidad, a la vez que obliga al lector a mantenerse atento. A su vez, le otorga mayor tensión a la trama, y esta deja de ser predecible, por lo que la intriga se mantiene hasta la última frase.

·      Contenido
Una novela de contrastes, de una continua exposición de valores humanos, universales la mayoría de ellos, pero también una novela de sentimientos profundos. Unos contrastes que pasan del retrato de los pasajes en blanco y negro, o cual retrato en sepia de cualquier ser humano, a una vida donde poco a poco van naciendo los colores, unas veces más vivos e intensos, y otras simplemente de color pastel, pero al fin y al cabo, colores.
Toca asuntos tan delicados como el del machismo o la violencia de género, y lo hace con un respeto, sutileza y una delicadeza tal que no dejan indiferente. En cambio, temas como el de la amistad, los trata de forma intensa, profunda, sin melindre, con fuerza y naturalidad, con un positivismo extremo. Porque la amistad es como el empuje que necesitamos para seguir, para no decaer en momentos de flaqueza, pero también es un pilar de la felicidad, y de eso se trata, de disfrutar la amistad sin límites. De hecho, en esta novela la amistad es uno de los ingredientes que mayor sabor le dan al “plato principal”.
Por supuesto el amor, en todas sus vertientes, es el gran protagonista de esta novela. Amor frente al desamor, otro contraste más que nos hará disfrutar de su contenido. Un tema central sobre el que giran casi todos los demás, entre los que destaca el de la autoestima. Porque el amor es el que es capaz de forjar la autoestima, ya sea buena o mala, alta o baja, camaleónica o equilibrada. Olivia siente el amor y el desamor, y como tal su autoestima sale verdaderamente dañada o se reequilibra poco a poco, según su actitud frente a los golpes de la vida y según de qué personas se rodea, más tóxicas o, por el contrario, bondadosas. Pero, de manera especial, destaca la incidencia que tiene en la autoestima el grado de amor que se tiene uno a sí mismo. 
En Mi vida sin ti, Recuerdos, encontramos retazos de la intimidad más profunda del ser humano, donde la protagonista nos desnuda su alma y nos cuenta sus miserias y sus momentos felices. Sin embargo, hay un detalle especial: lo narra visto desde un prisma privilegiado, el de la madurez. Por eso, al contarnos sus recuerdos, a través de ellos nos hace pasar por una serie de etapas magistralmente narradas. De ahí que el lector pueda sentir y sumergirse de lleno en la historia, incluso participar en ella. Porque de eso trata también la literatura, de hacer sentir. Pues bien, en esta novela, Olivia nos hace experimentar rabia, impotencia, desprecio, incomprensión, y a la vez nos conmueve con pasajes de auténtica dulzura, estabilidad, felicidad. Ella es quien es capaz de llevarnos de un estado a otro, a veces, incluso, dentro de un mismo párrafo de la novela. Es el tipo de protagonista capaz de adentrarse en la mente del lector, y casi me atrevería a decir que llega a tener el poder de dirigirlo en la lectura hacia donde ella quiere, o pretende. Con esta aptitud que le confiere al personaje de Olivia, la escritora no hace más que cumplir su cometido de que captemos la esencia de la vida, sus enseñanzas, a través de lo bueno y lo malo. Y que comprendamos que la vida tiene muchas etapas, que es preciso vivirlas, para progresar como seres humanos y crecer espiritualmente.
En definitiva, Olivia nos enseña que la vida no es un continuo caminar hacia adelante. A veces se retrocede involuntariamente, aunque ello no es más que parte de un constante aprendizaje, y como tal, debemos verla bella, en su magnitud y plenitud, porque de lo malo siempre sacaremos algo que nos ayude a ser felices en el futuro. Nada ocurre porque sí, pero tampoco debemos ser impacientes. Y ese es otro de sus cometidos, hacernos ver que no hemos nacido perfectos, y que para aprender y seguir creciendo es preciso que nos equivoquemos, nos levantemos, rectifiquemos…
Como siempre en cualquier novela, el marco elegido es la excusa, un pretexto donde el escritor nos lleva hacia un punto intencionado. Y en este caso, desde mi humilde parecer, Mila Espigar elige la narración de los recuerdos de la vida de Olivia como una excusa para enseñarnos algo que va más allá: las diferentes etapas por las que puede pasar el ser humano y cómo podemos afrontarlas. El antiguo y frustrado amor de Olivia, en contraste con lo que vivirá después, forma parte de lo que podríamos llamar una ruptura con el pasado. Una ruptura necesaria en todo ser humano, en cada uno en un distinto momento de su vida, para poder pasar página, mirar hacia delante y ser capaz de encontrar la felicidad. Y para ello os dejo una frase, que me parece magistral, y que para mí marca ese punto de inflexión en la novela sobre lo que os acabo de decir:
Sabía que si escribía sobre aquel capítulo de su existencia, borraría y dejaría un espacio en la biblioteca de su mente para que, de ahora en adelante, lo pudiera ocupar cualquier otro buen recuerdo […]
El final es una auténtica sorpresa. Un detalle inesperado y que, sin embargo, convierte en pura lógica y entendimiento el contenido de toda la novela; un juego de doble sentido con el que la escritora nos sorprende incluso hasta en el último párrafo. Un desenlace que, sin duda, le confiere un sentido pleno y especial al título, Mi vida sin ti, Recuerdos, que se transforma en un arma de doble filo y que pone de manifiesto, una vez más, las ironías de la vida. Solo que a través de esa ironía nos da, desde mi punto de vista, la lección central y magistral de toda ella: vive la vida, disfrútala, carpe diem; no permitas que pequeñas cosas detengan el tiempo y tu felicidad. Un final que toca la fibra y llega hondo, porque trata un tema muy presente y delicado hoy en nuestra sociedad, solo que me es imposible desvelaros. Y no, no me refiero al tema del machismo o de la violencia de género, así que os dejaré con la curiosidad para que compréis el libro y lo descubráis por vosotros mismos.

·      Conclusiones

Es una novela corta, de aparente sencillez que, sin embargo entraña una cierta complejidad, por lo que no es una lectura simple ni de pura evasión. A través de un relato cualquiera, en este caso la vida de Olivia y sus recuerdos, la autora nos muestra todo un entramado psicológico sobre la mente humana de gran valor. Ya hemos dicho que habla de la vida, de cómo puede pasar de ser un retrato macilento a convertirse, no en una mera lámina pictórica, sino en una escena de colores de distinta intensidad, fiel reflejo del estado de felicidad o infelicidad del ser humano. Y en esta historia, será la actitud de Olivia frente a la vida la única responsable de las tonalidades que adquiera el marco de su existencia.
Por ponerle un pero o pequeña objeción, ya que no existe la novela perfecta y no quiero que esta lo parezca, pienso que la estructura se podría mejorar un poco. No obstante, dado el grado de dificultad que esto entraña y teniendo en cuenta que se trata de una escritora novel, no se le puede decir a modo de reproche, sino de mero consejo personal por mi parte.
Con todo, me parece una lectura totalmente recomendable, amena y enriquecedora.
Enhorabuena, Mila Espigar, porque me has demostrado que eres capaz de hilvanar historias profundas desde la sencillez, con esa guinda que le has puesto al final y gracias al cual he comprendido todo, a la par que he disfrutado doblemente el libro.






MONOGRÁFICO 15/12/13

Un año con nosotras

De Clásica y Poesía, Paloma Contigo, La Universal Radio


Empecé en la universal radio en el Programa de Paloma Contigo Clásica y Poesía por pura casualidad.

Estando un día en el mes de Julio hablando con Paloma me dijo si quería leer algo para su programa, le dije bueno pero no te garantizo que salga bien, me paso el texto, de Rubén Darío, lo leí un par de veces y le dije, vale vamos allá y bueno para ser la primera vez y en directo ahí quedó.

Os lo recuerdo

Margarita está linda la mar,
y el viento,
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar;
tu acento:
Margarita, te voy a contar
un cuento:


Poco tiempo después en otro directo dedicado a las Madres leí un poema y en otro leí un fragmento del manuscrito en una botella de Edgar A. Poe, luego leí poesía y después se fueron incorporando, Julia Zapata, Virginia Oviedo, Koncha Morales y mas tarde, en una intervención de un momento muy puntual Marian Mira.

Y bueno hice varios directos hasta que descubrí que podía grabar en mi portátil y pasarle a Paloma la grabación de una tarde de Clásica y Poesía y hala palante y hasta hoy, mucho menos estresante.

De los programas en directo que he hecho uno con Julia, fue muy divertido, cada vez que lo recuerdo me hago cruces de cómo pudo salir con la cantidad de dificultades que tuvimos, caída de red, tres ordenadores en marcha subiendo y bajando texto y música, un calor insoportable, pero fue genial. 
Por mi parte volvería a repetirlo.

No tengo todas las grabaciones pero están en el ivox, algunas son, de verdad, geniales de como salieron por la dificultad que entrañó su realización.

Yo lo he pasado, hasta hoy, francamente bien, tanto grabando en casa como en los directos.
Es cierto cuando dicen “cosas del directo”, porque lo hemos vivido.

Tengo dos anécdotas de un par de ellos, uno en el que Virginia entraba tarde, la llamaba Paloma y no había forma de localizarla, así que con la maestría que la caracteriza, sigue adelante y yo intento por otro lado hacerme con Virginia, por fin la localiza Paloma, entra y yo no me doy cuenta de que no he silenciado mi móvil cuando de repente se pone a sonar como una fiera, cojo el teléfono y salgo disparada para que no se oyera y donde me meto? No, donde me voy? a la escalera donde mas eco había y sin cerrar la puerta.

El otro fue genial también, estamos las dos haciendo el directo, yo con mi escrito para leer, Paloma con el texto larguísimo de nombres de compositores, todos ellos imposibles de pronunciar en alemán y ruso, de repente le da un golpe de tos de los que no te dejan ni hablar y que no podía parar de forma alguna, por señas me dice que lea y yo tomo el relevo y comienzo a leer, nos entra a las dos la risa porque los nombrecitos eran tela y como pudo corto y puso música, bueno nos partíamos de risa cuando todo se arreglo, pero fue un momento de los que si hubiésemos estado en una emisora convencional creo que nos hubieran tirado a la calle.

Los que mas me han gustado, todos, sobre todo el que hicimos de las nenas como le llamamos, el que hicimos homenajeando a las madres, el de Santa Teresa, el programa a la amistad…. En fin que os voy a decir, comprobadlo vosotros están en el ivox todos.

Y hoy hemos dicho adiós a una etapa, nos hemos despedido en directo Paloma y yo, nos vamos de vacaciones de Navidad, quizás no regresemos a La Universal Radio, o quizá sí, de todas formas sea donde sea seguiremos juntas las cinco con ella al frente y con el mismo programa PALOMA CONTIGO CLÁSICA Y POESÍA.

Hasta entonces os deseo que paséis unas Felices Fiestas de Navidad y que tengáis un Próspero y Venturoso Año Nuevo.

Hasta siempre.

MEG
15/12/13



 *^*^*^*^* 










Aquí dio comienzo la aventura.
La presentación en sociedad de Mi Vida sin Ti, Recuerdos, en las Primeras Jornadas en El Ejido, Almería, el 26 de Mayo de 2012.

Un mes mas tarde, el 28 de Junio, llego la presentación en Villajoyosa.

Que tarde-noche para no olvidar.

Si en El Ejido fue bonito, en La Vila fue lo mas entrañable y fantástico que he vivido y que probablemente viviré.

Aquí me acompañaron los amigos, a los que nunca podré agradecer todo cuanto han hecho por mí.

La familia; un hermano y su mujer, por todos los hermanos; la mayor de los sobrinos por sus hermanas y sus primos y la mayor de los sobrinos-nietos en representación de la generación mas joven de la familia. Y como no la hija de los íntimos amigos considerada una mas de la familia.

Compañeros de trabajo representando a los compañeros de los diferentes puestos que he ocupado en mi vida laboral.

Amigos de la Vila españoles, franceses y noruegos.

Y las dos personas que hicieron posible, una con sus pinturas, otro con su asesoramiento, que este "primer hijito" de papel haya visto la luz.





Y aquí la aventura de estar en la Diada de Sant Jordi, Barcelona.

La alegría de encontrar a muchos compañeros, amigos desde El Ejido, que hacia un año que no nos habíamos visto.

Pasamos un gran día. Este es el cartel que nos hizo David Arrabal, con los nombres de todos.

Jornada inolvidable.





Pero no quedo ahí.

Una compañera-amiga, Virginia Oviedo, me invito a la Feria del Libro de Valencia.

Y como no, fui. Otra tarde inolvidable.


2 comentarios:

  1. Sin duda debe de ser emocionante eso de presentar en sociedad por primera vez una criaturita de papel con negro sobre blanco. Lo cuentas de una forma tan entrañable... Os deseo lo mejor, a tu criaturita y a ti, así como que vengan más en un futuro. Un beso.

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  2. Gracias Marian, no se que decir, solo agradecer tu amistad. Mil besos.

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